Muere un
segundo espeleólogo de los tres accidentados en Marruecos
MSN Noticias
El
Ministerio del Interior ha informado de que ha fallecido un segundo los
tres espeleólogos accidentados en Marruecos. Se trata del inspector
jefe de la Policía Nacional José Antonio Martínez, quien se encontraba herido.
De esta forma, son dos los muertos en Marruecos a causa del accidente ocurrido
en el sur de ese país, pues a primera hora del domingo se informó del
fallecimiento de otro de los integrantes del grupo, Gustavo Virués. El tercer
accidentado, ileso, ha sido rescatado, según ha confirmado un portavoz de
Interior.
El
abogado Gustavo Virués Ortega, de 41 años y residente en Granada, es uno de los
españoles fallecidos en el accidente en el sur de Marruecos, según ha informado
el Ministerio del Interior. Estaba casado y tenía dos hijos. La operación de
rescate de los tres espeleólogos españoles que se encuentran en el fondo de un
acantilado de 400 metros
en el sur de Marruecos, continúa su curso, según han informado a Efe fuentes de
la Gendarmería Real de la provincia de Uarzazate.
El
segundo fallecido es José Antonio Martínez, inspector jefe de la Policía
Nacional, de 41 años, quien sufría una fractura en la pierna y una
contusión en la cabeza. Un portavoz del Ministerio del Interior ha
explicado a EL PAÍS que "no ha podido superar la gravedad de sus
heridas".
El
agente Juan Bolívar, por su parte, ha resultado ileso. El ministro del
Interior, Jorge Fernández Díaz, ha informado a las familias de los tres
españoles atrapados en Marruecos sobre su situación, antes de que la
información se hiciera pública.
Por
su parte, Marruecos autorizó este domingo la entrada del avión de la Policía
Nacional que parte hacia ese país con siete agentes para contribuir al rescate.
Se trata de cuatro guardias civiles del equipo de montaña y tres agentes del
Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía Nacional. Los siete llevan
los medios y materiales especializados necesarios para un rescate en una
operación que se prevé "muy compleja técnicamente".
El
sábado por la noche, las autoridades marroquíes en la zona, a través de la
agencia oficial MAP, informaron de que uno de los tres espeleólogos había
fallecido al caerse por el acantilado, pero no se facilitó su identidad.
Los
tres españoles viajaron hasta Marruecos en un grupo organizado
procedente de Sevilla y compuesto por nueve personas, y estaban preparados
técnica y físicamente para afrontar la expedición. Se separaron del grupo
el pasado lunes, quedaron en encontrarse esa misma tarde o el martes y, tras no
saber nada de ellos, el jefe de la expedición presentó la denuncia el miércoles
ante la Gendarmería marroquí y avisó al Consulado. De hecho, el resto de
integrantes del grupo, que decidieron quedarse la pasada noche en la montaña
para ayudar en la búsqueda, fueron los primeros en localizar a sus compañeros.
Exteriores
había confirmado este sábado que la Gendarmería marroquí había localizado a los
espeleólogos perdidos en un barranco de la zona en la que desaparecieron.
Primero fueron "avistados" desde el aire, en la zona montañosa
situada en la localidad de Tarmest, perteneciente a la comunidad rural de
Iminulauen, en la provincia de Uarzazate (Marruecos). Inicialmente, la esposa
de uno de ellos reveló que el Ministerio del Interior les había informado que
había un herido, sin precisar en qué condición ni su identidad.
Julia
Ordóñez, la mujer del espeleólogo José Antonio Martínez, detallaba el sábado
que dos de los tres deportistas se encontraban bien y habían reaccionado con
señales al vuelo de las unidades aéreas destinadas a su búsqueda y que un
tercero necesitaba asistencia sanitaria, sin que entonces se conociera la
gravedad de las lesiones ni su identidad. "El ministro ha llamado a todas
las familias para comunicar las novedades. Han ampliado ahora la información
diciendo que un helicóptero se ha desplazado a la zona con personal de rescate
para atender a los tres, uno con algún tipo de lesión, que está
accidentado", relató Ordóñez, quien subrayó el agradecimiento de las
familias de los tres andaluces por la colaboración entre ambos gobiernos y el
"apoyo y abrigo" de un grupo de auxilio desplazado hasta el lugar.