No
a mucho me quitaron la escayola de la mano, llevo una venda compresiva y una
protección más, para evitarme problemas. Qué mejor en el día tan fantástico de
hoy que una excursión por las calas de Mallorca, tan bellas ellas, en búsqueda
y captura de una hermosa cavidad. Y aquí nos tienes; Pilar, Pedro, Gabriel y un
servidor, de exploradores.
Hallada
la susodicha, nos exponemos a los peligros de la naturaleza, que no dejan de
poner obstáculos a fin de conservar y proteger sus tesoros. El acceso es
peliagudo y extremo, ¿vale la pena exponerse tanto?.
PARA VER TODAS LAS FOTOS PINCHA AQUÍ